Un nuevo estudio de 2.000 personas de 18 a 35 años ha revelado un cambio notable en las aspiraciones de ahorro de los jóvenes en comparación con las de sus padres.
Un nuevo estudio de 2.000 personas de 18 a 35 años ha revelado un cambio notable en las aspiraciones de ahorro de los jóvenes en comparación con las de sus padres.