Por qué sorber fideos es una señal de respeto y disfrute en la cultura japonesa.


Para sorber o no para sorber, esa es la pregunta.
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Una tradición arraigada en la historia

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El arte de comer fideos calientes
La cocina japonesa es reconocida por su precisión en la preparación y presentación, y esto se extiende a cómo se debe consumir alimentos. Ramen, Udon y Soba generalmente se sirven a la tubería caliente, y el tiempo lo es todo. Los fideos requieren una coordinación perfecta desde el momento en que se hierven cuando se agrega la sopa, y deben disfrutar rápidamente para experimentar su sabor y textura óptimos.
Slurping tiene un propósito práctico en este contexto porque al dibujar en el aire mientras come los fideos, los comensales pueden enfriar la comida caliente cuando entra en su boca. Esta técnica evita escalar el interior de la boca y abarrotar las papilas gustativas, lo que permite una experiencia gastronómica más cómoda y agradable. Es esencialmente un mecanismo de enfriamiento que permite a las personas comer los fideos a su temperatura y tiempo ideales.
Más allá del control de la temperatura, el sorbo también sirve para mejorar la experiencia sensorial general de comer fideos. Al igual que la degustación de vinos, donde tanto el sabor como el aroma son cruciales para la experiencia completa, sorber fideos permite a los comensales respirar en los aromas mientras comen. Esta práctica involucra a los receptores olfativos, y dado que el olfato afecta significativamente el sabor, el sorbo en realidad mejora el sabor de los fideos y desbloquea su máximo potencial.
Un cumplido para el chef
Si bien no es la razón principal para el sorbo, los sonidos hechos mientras come puede indicar disfrute y aprecio al anfitrión o el chef. En la cultura japonesa, estas expresiones audibles de satisfacción comunican que el comensal está disfrutando de su comida. Sin embargo, es importante tener en cuenta que este es más un efecto secundario natural que un intento deliberado de transmitir cumplidos.
Al visitar Japón y disfrutar de un tazón humeante de ramen, udon o soba, abrazar la costumbre local de sorber no es solo para seguir la etiqueta, se trata de participar en una tradición centenaria que maximiza tanto el disfrute práctico como la apreciación cultural de una de las experiencias culinarias más queridas de Japón.